Estudiar y trabajar, la opción para los jóvenes
Argentina - 01/07/2006 – La Nación - Sección: Cultura

Es la única alternativa que ve el 47,6% de los egresados
 

Casi nueve de cada diez chicos que terminan el secundario en la Argentina quieren seguir estudiando. Sin embargo, el 47,6% sabe que, al mismo tiempo, tendrá que trabajar. Mientras que el 60% aspira a seguir una carrera universitaria, el 26,5% se inclina por una carrera corta o estudios terciarios. En tanto, para el 6,7%, buscar un empleo es el único camino posible.

Los datos provienen de un sondeo realizado en 2005 como parte del Operativo Nacional de Evaluación, que llegó a 378.517 estudiantes del último año del nivel medio en todo el país, y no sólo permite comprobar y celebrar las aspiraciones de los chicos por seguir estudiando, sino también prever la demanda sobre la educación superior.

Así, los números indican que, si se concretan los deseos que expresan los chicos, habrá unos 227.104 nuevos ingresantes en las 100 universidades del país y más de 100.000 buscarán ingresar en institutos terciarios.

"Es importante señalar que tantos chicos quieran seguir estudiando. La motivación que existe no se modificó a pesar de todas las crisis que vivimos en los últimos años", dijo a LA NACION Marta Kisilevsky, a cargo de la Dirección de Información y Evaluación de la Calidad Educativa del Ministerio de Educación, en referencia a los mismos datos registrados en 2000. En ese momento, la proporción de chicos que aspiraba a continuar estudios era del 81%, sólo levemente menor.

La comparación muestra un crecimiento de las carreras cortas en las preferencias de los chicos: en 2000, el 21% pensaba en ellas como opción de futuro, una cifra que creció algo más de cinco puntos en los últimos años.

Cifra Duplicada
Si los datos del año pasado se miran de cerca, aparecen otras tendencias interesantes. Por ejemplo, de quienes aspiran a ir a la universidad el año próximo, el 28,5% compartirá el estudio con el trabajo; lo mismo deberá hacer el 19,1% que quiere seguir una carrera terciaria.

En tanto, mientras casi 26.000 chicos no saben qué harán cuando terminen la escuela media, el 6,7% sólo tiene previsto trabajar. Se trata de una cifra que duplica la del año 2000, cuando sólo el 3% de los chicos tenía planeado trabajar, como única actividad luego del secundario.

Cruzadas con otras variables, las cifras confirman algunas percepciones. Si se separan las aspiraciones por género, la única diferencia significativa es entre quienes sólo van a trabajar: el 10% de los varones, pero sólo el 4,1% de las mujeres. Ellas representan un porcentaje levemente mayor entre quienes van a estudiar una carrera universitaria sin trabajar: son el 33,9 %, contra el 28,4 % de los varones.

En cuanto al tipo de escuela al que asisten los chicos, quienes van a establecimientos privados son mayoría entre los que irán a la universidad sin trabajar (el 43,1%, contra el 25,5% en las estatales), mientras que los chicos que van a escuelas públicas se destacan entre quienes esperan trabajar y estudiar una carrera corta (el 22,8%, contra el 11,9% en las privadas) y superan largamente a los que sólo irán a trabajar (el 8,4%, contra el 3,6% de quienes asisten a escuelas privadas).

En cuanto a las regiones del país, los que aspiran a trabajar y estudiar una carrera universitaria son clara mayoría en la ciudad de Buenos Aires (71,6%) y Cuyo (67,6%). Si se suma a los chicos porteños y a los que viven en el conurbano, 72.514 nuevos ingresantes golpearán las puertas de las universidades de la zona que, con 47 instituciones, concentra a casi la mitad de las universidades argentinas.

En tanto, los que van a trabajar y estudiar una carrera corta -repartidos más igualitariamente en todo el país- son más en el Nordeste (31,8%) y el Noroeste (31,4%). Y los que sólo van a trabajar representan el 10,4%, la cifra más alta, en el conurbano.