Aportes para monitorear y evaluar las Metas Estratégicas 2014, coordinadas por la Jefatura de Gabinete de Ministros

En la Argentina, las Metas Estratégicas 2014 constituyen un esfuerzo para planificar y coordinar la acción del Estado a través de 204 objetivos y 272 metas de gestión. Las metas y los objetivos abarcan 15 ministerios, 2 secretarías de Estado, 1 organismo autárquico y 1 organismo descentralizado. Esta herramienta de planificación de la gestión del Estado incluye objetivos que buscan promover industrias, fortalecer el trabajo de determinados grupos sociales, diversificar la provisión de servicios, optimizar la producción, aumentar variables macroeconómicas como el consumo y la inversión, e incrementar la cobertura de los programas existentes entre otras.

Las metas de gobierno sistematizan y ordenan la agenda de trabajo de la Jefatura de Gabinete de Ministros (JGM), tienen el potencial de mejorar el foco estratégico de la acción de gobierno y el desempeño de los ministerios y de promover la alineación de planes y programas con objetivos medibles.

Gestión integral de los residuos sólidos urbanos: políticas municipales que promueven la sustentabilidad

Este documento presenta los tres grandes desafíos que existen a nivel nacional respecto de la gestión de residuos: la generación de información sistematizada y confiable, la articulación intersectorial y la interjurisdiccional.

Además, destaca iniciativas locales que lograron avances en alguna de las etapas de la gestión de los RSU –a saber, la generación, la recolección, el tratamiento, la disposición final y la reinserción en el mercado–: Rosario (Santa Fe), Morón (Buenos Aires), Rivadavia (Buenos Aires), Bahía Blanca (Buenos Aires), Santa Fe (Santa Fe), Rafaela (Santa Fe) y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Estos municipios promovieron la incorporación de una mirada integral e incentivaron la adopción de pautas sustentables en el manejo de los residuos domiciliarios. Además, constituyen una inspiración para otros municipios que desean mejorar el tratamiento que dan a la basura.

Inclusión de los jóvenes en la Provincia de Buenos Aires

Los jóvenes constituyen uno de los principales activos de nuestra sociedad. Serán ellos, los adultos del mañana, quienes sostendrán (no solo económicamente) nuestro futuro. La forma en la que los jóvenes se conviertan en adultos determinará en gran parte las características que ese futuro tendrá.
 
La mirada predominante en la opinión pública acerca de los jóvenes resalta su vínculo con la delincuencia y la inactividad, sintetizada en el concepto de los “ni-ni” (jóvenes que no estudian ni trabajan ni buscan trabajo). Un análisis más detallado de la temática evidencia que esta concepción tiende a simplificar a “la juventud” en un conjunto homogéneo que dista de su caracterización real (más cercana a diversas juventudes). Además, se minimizan las múltiples dimensiones que inciden en el desarrollo y la inclusión social de los jóvenes durante su tránsito a la vida adulta (que incluyen, pero trascienden los ámbitos laborales y educativos).
 
La Provincia de Buenos Aires concentra a 3,8 millones de jóvenes (un 10% de la población total del país y casi el 40% de todos los jóvenes argentinos). CIPPEC consideró fundamental analizar la situación actual de estos jóvenes y la forma en la que transitan hacia la adultez. También es importante determinar de qué forma las intervenciones implementadas por el Estado nacional y provincial contribuyen a que este tránsito sea más fluido.

Recomendaciones integrales de política pública para las juventudes en la Argentina

El objetivo  de este documento es aportar al debate sobre la situación actual de las juventudes en la Argentina, con el explícito propósito de esbozar recomendaciones de política pública. Para ello, se parte del análisis de las intervenciones del Poder Ejecutivo Nacional dirigidas a los jóvenes, así como de los proyectos legislativos presentados en 2013 y 2014.

El análisis refleja una serie de desafíos importantes: falta un enfoque integral que estructure estratégicamente las intervenciones requeridas y es necesario aumentar la calidad de las políticas sectoriales y revisar la modalidad actual de intervención a través de programas fragmentados (incluso al interior de cada sector) y la discontinuidad de las intervenciones.

Sobre esta base, se propone, avanzar en tres frentes: el institucional, el programático y el normativo. Para ello, se presentan 10 recomendaciones de política pública. Estas recomendaciones no constituyen una propuesta completa, sino que aportan elementos para el debate político, técnico y social, lo que implica que lo que se haga deberá adaptarse a las dinámicas del federalismo argentino y deberá estar encuadrado en acuerdos fiscales sostenibles en el mediano plazo.

Las retenciones sobre la mesa: del conflicto a una estrategia de desarrollo

Este documento propone un recorrido más amplio. Bucea en la larga historia argentina en materia de derechos de exportación, examina en detalle la experiencia de la postconvertibilidad a la luz de las experiencias internacionales y analiza los
argumentos esgrimidos a favor y en contra de este tributo.
Las principales conclusiones son las siguientes: (a) las retenciones no son un buen impuesto y deben ser reemplazadas gradualmente por tributos menos distorsivos y más equitativos; (b) debe discutirse una estrategia de desarrollo que apunte en forma coherente a incentivar a la producción agropecuaria y, al mismo tiempo, a proteger a los más pobres; (c) la Argentina es el único de los grandes exportadores mundiales de alimentos que aplica retenciones a casi todos los productos agropecuarios, con alícuotas tan elevadas y por periodos tan prologados de tiempo; (d) la experiencia histórica argentina sugiere que las retenciones han sido eventualmente desmanteladas ante escenarios de inflación elevada y apreciación cambiaria creciente como el periodo abierto desde fines de 2005 hasta la actualidad ; (e) más que medidas compensatorias con alto costo fiscal es preciso incrementar la productividad rural; y (f) el conflicto entre el Gobierno nacional y sector agropecuario
disparado en marzo de 2008 es explicado en gran parte por las falencias del sistema político argentino para procesar políticas públicas en forma institucionalizada y consensuada.