Reformulando la narrativa sobre futuro del trabajo. La perspectiva del Sur Global.

Publicado en febrero de 2022

Hay un error fundamental al intentar predecir el futuro: aún no existe. No hay nada que revelar y todo por crear. En este sentido, asumir la capacidad de transformación del Sur Global es el primer paso para no predecir, sino para construir un futuro laboral mejor. No sólo para el Sur Global, sino para la economía mundial: los países en desarrollo representarán el 90% de la población mundial en edad de trabajar en 2050.

En este documento, elaborado en el marco de la iniciativa FOWIGS (Futuro del Trabajo en el Sur Global), hemos tratado de proporcionar un primer conjunto de elementos que sirvan para adaptar la narrativa estándar sobre el futuro del trabajo al contexto de estas diferentes regiones.

Acceder al documento (en inglés)

Sobre FOWIGS

El Futuro del Trabajo en el Sur Global (FOWiGS, por sus siglas en inglés) es una iniciativa apoyada por el Centro Internacional de Investigaciones para el Desarrollo (IDRC) y coordinada por CIPPEC. Su objetivo es comprender las implicaciones del cambio tecnológico en los empleos desde una perspectiva del Sur Global aportando datos, conocimientos y marcos de políticas para construir narrativas basadas en evidencia sobre el futuro del trabajo en los países en desarrollo.

Efectos emergentes del fortalecimiento de las plataformas digitales. Informe de evaluación del Premio Emprendedor Digital.

Publicado en febrero de 2022

El proyecto “Desarrollo de la economía de plataformas en ciudades como instrumento para promover la inclusión social, el emprendimiento y la innovación” implementado por CIPPEC con financiamiento de BID Lab (el Laboratorio de Innovación del Banco Interamericano de Desarrollo) iniciado en 2017, procuró contribuir a mejorar la calidad de vida y a generar oportunidades económicas para los habitantes de ciudades argentinas usando las posibilidades de la economía de plataformas como palanca para facilitar un mejor acceso a servicios y oportunidades de emprendimiento.

Este trabajo busca evaluar los efectos emergentes del proyecto en dos niveles. Por un lado, pretende encontrar y caracterizar los efectos producidos en los emprendimientos ganadores del Premio Emprendedor Digital 2019 a partir de la participación en el proyecto. Por otro lado, intenta identificar los efectos que los emprendimientos pueden producir en las ciudades y generar información sobre los casos más avanzados en su implementación. Esto permitirá informar el debate de políticas sobre los cambios que las plataformas digitales son capaces de generar en las ciudades y conocer la experiencia de los emprendedores de este sector en diferentes contextos urbanos.

Para la evaluación del proyecto Premio Emprendedor Digital 2019, se reconstruyó su teoría de cambio y se realizaron entrevistas semiestructuradas a una selección de 10 emprendimientos participantes y a algunos de sus actores vinculados. Además, se complementó esta información con preguntas específicas en una encuesta realizada a los 58 emprendimientos participantes del Premio. Para la evaluación de los efectos incipientes, se decidió concentrar el análisis sobre los 10 emprendimientos de mayor grado de implementación, con el fin de identificar sus posibles efectos una vez en funcionamiento y no trabajar con conceptos puramente teóricos. La información recolectada permitió comprender los efectos que los emprendimientos tienen en las ciudades y, a su vez, caracterizar los efectos producidos en los emprendimientos a partir de su paso por el Premio.

Se identificó que las plataformas digitales tienen potencial para cambiar las dinámicas de tres sectores fundamentales para las ciudades: empleo, comercio y movilidad. La más significativa es la de empleo, en tanto se destacan, en muchos de los casos, instancias de empleo directo que conforman oportunidades para que los trabajadores reciban ingresos adicionales a su ocupación principal, aportando perspectivas más adaptables a su disponibilidad. En términos de comercio, pudimos observar que buena parte de las plataformas analizadas operan como canal de venta para un gran número de comercios, siendo los pequeños los más beneficiados por estas dinámicas. Se destaca el potencial democratizador de las plataformas en la medida en que posibilitan la igualdad de condiciones en su llegada a los usuarios consumidores. Dentro de los efectos en la movilidad, se puede destacar el potencial descentralizador de las plataformas, en tanto se observa una constante en la reducción del traslado requerido para acceder a determinados productos o servicios, tanto por los consumidores como por los prestadores de servicio.

Sin embargo, este tipo de efectos son de carácter potencial en la mayoría de los emprendimientos analizados. Este fenómeno puede deberse al estado emergente del uso de plataformas en las ciudades donde se desarrolló el Premio, además de la escala de sus mercados, la disponibilidad del capital humano necesario y las oportunidades de financiamiento desigual. En los casos analizados, la mayoría de los casos avanzados se encontraban en las ciudades participantes más grandes, como Córdoba y Mendoza.

En este sentido, los emprendedores de las ciudades más pequeñas, como Puerto Madryn, Resistencia o Catamarca, destacaron la falta de acceso al financiamiento para el desarrollo de sus plataformas en estos mercados y la ventaja que esta oportunidad implicaba en cuanto al acceso de recursos en ciudades más centrales. Esto es una gran barrera para el desarrollo de tecnología en general y de las plataformas en particular, y por lo tanto un posible “techo” en su crecimiento. En este sentido, iniciativas como la del Premio Emprendedor Digital, que priorizan el desarrollo federal, son una oportunidad para sortear inequidades mediante la sensibilización del ecosistema emprendedor, el acceso a oportunidades de desarrollo y apoyo a soluciones a problemas locales que, de otra manera, quedarían solo disponibles para territorios con ecosistemas más avanzados. Es importante notar que el premio no necesariamente logró acelerar el desarrollo de todos los emprendimientos participantes, sino que tuvo un efecto mayor en aquellos que se encontraban en las etapas de ideación y validación.

A partir del análisis de las experiencias del Premio, se destacan tres roles que el Estado podría tomar para este fin. El primero tiene que ver con su rol de regulador: es fundamental que el sector público esté en la vanguardia de las posibilidades de la tecnología para poder ofrecer la regulación necesaria para que estos nuevos formatos de economía alcancen su potencialidad sin vulnerar los derechos de las personas. Otro posible rol está relacionado a su capacidad para estimular la innovación digital y urbana, mediante la generación de espacios de colaboración, apoyo en el desarrollo o financiamiento directo. Por último, cabe destacar el potencial del Estado como posible consumidor de innovación. En muchos casos los emprendedores de las plataformas ganadores del Premio Emprendedor Digital desarrollaron herramientas que serían usualmente ofrecidas por el Estado en sectores tan distintos como la cultura o el transporte, mediante la unificación de la oferta de la ciudad en un solo lugar. En esos casos, la iniciativa privada puede resultar un complemento interesante a los desarrollos del propio Estado, aportando agilidad y eficiencia mediante la expertise y tecnología que los emprendedores locales han ido desarrollando en sus respectivas áreas de trabajo.

En el último apartado del documento, se realiza una exposición en profundidad de tres de los casos estudiados, en el que se puede comprender de forma más detallada su lógica de funcionamiento y sus potenciales impactos, según lo detallado por los emprendedores. Estos casos son Filadd, Agrojusto y Ualabee.

El impacto distributivo de las políticas previsionales en Argentina

Publicado en enero de 2022

Las políticas previsionales tienen como objetivo principal la redistribución de ingresos y, por consiguiente, de la capacidad de consumo entre distintas generaciones de una población. Estas herramientas suelen ser utilizadas para redistribuir recursos entre sectores de la sociedad definidos por otros criterios, tales como niveles de ingresos previos, ocupaciones laborales, género o lugar de residencia.

Más allá de los objetivos explícitos de redistribución, es habitual observar que los sistemas previsionales producen efectos no necesariamente planeados por quienes los diseñaron. Medir estos efectos posibilita evaluar la efectividad de las políticas, ya que los mismos pueden reducir o incluso revertir los impactos buscados inicialmente. Los sistemas previsionales pueden ser considerados como esquemas de política pública de recaudación y transferencias similares a otras como la provisión de servicios de salud o de infraestructura, o como un esquema de ahorro forzoso de parte de los salarios, que luego son devueltos a los individuos. Adoptar una u otra definición tiene un fuerte impacto en el análisis y posibles conclusiones, por lo que es necesario abordar la discusión respecto a los impactos esperados del sistema previsional.

En Argentina, el diseño de los sistemas previsionales ha tendido a mantener un sesgo distributivo progresivo, gracias al rol de varios elementos como los haberes mínimos y máximos, el uso de fórmulas progresivas en el cálculo de los beneficios, el otorgamiento de beneficios no contributivos o semicontributivos a amplios sectores de la sociedad y algunas condiciones ventajosas para las mujeres. Sin embargo, algunos aspectos no considerados en el diseño original de los esquemas, pero relevantes en la práctica, han tenido efectos regresivos sobre la distribución, como el financiamiento de beneficios con recursos de rentas generales, la fragmentación del sistema con mejores beneficios para determinados grupos (a través de distintos regímenes de excepción), los efectos de diferenciales de mortalidad y otros similares. Por ello, el impacto final sólo puede ser evaluado con datos reales, aún en un contexto de información incompleta.

Por sus objetivos básicos y su diseño, es inevitable que los sistemas previsionales tengan impactos distributivos. Esto lleva a que el principal desafío para quienes los diseñan e implementan no es evitarlos o minimizarlos, sino hacerlos explícitos y transparentes, mostrando qué sectores de la sociedad se benefician y en qué magnitud, facilitando así un debate público. Avanzar en esa dirección permitirá la construcción de un sistema con más credibilidad y, por consiguiente, sostenibilidad en el mediano y largo plazo.

Las alianzas multisectoriales en Educación: una mirada desde América Latina y el Caribe

Publicado en octubre de 2021

América Latina tiene un importante camino por recorrer en la búsqueda de sistemas educativos que garanticen el acceso y la calidad para todos los niños, niñas y jóvenes. Más allá de los avances logrados a lo largo de las últimas décadas en materia de inclusión educativa, estos esfuerzos se dan en un escenario de desigualdades estructurales que dificultan la articulación de las políticas educativas y la construcción de agendas estratégicas de largo plazo.

Diseñar, implementar y monitorear políticas educativas resulta desafiante en contextos atravesados por altos niveles de fragmentación política, restricciones económicas recurrentes e interrupciones sucesivas de procesos que requieren de esfuerzos consensuados y sostenidos en el tiempo. Frente a este escenario, muchos de los intentos por revertir estas desigualdades y avanzar hacia una mayor justicia educativa se ven frustrados en discusiones marcadas por la coyuntura que dificultan la construcción de acuerdos. Estas limitaciones para cimentar las bases comunes sobre las que desarrollar y priorizar acciones específicas desde el conjunto de la sociedad implica serios obstáculos para garantizar trayectorias educativas completas y aprendizajes significativos en los países de América Latina.

Este documento parte del supuesto de que las alianzas multisectoriales son una vía para fortalecer las políticas educativas a partir de la colaboración entre diferentes actores y sectores. Su desarrollo conlleva la construcción de miradas de largo plazo, la puesta en valor de fortalezas múltiples y la articulación de actores comprometidos con priorizar una agenda educativa. En este sentido, las alianzas representan un medio para acompañar a los Estados en la búsqueda por garantizar el derecho a la educación, pero también una forma de reflejar su multidimensionalidad y su estrecho vínculo con la posibilidad de construir sociedades más prósperas, sustentables y justas.

Construir estos marcos de colaboración no es una tarea sencilla. Existe un complejo entramado de variables detrás de una alianza multisectorial en educación que implica comprender factores contextuales, desarrollar modos de organización y construcción institucional, desarrollar capacidades colectivas y responder a oportunidades de mejora. Al mismo tiempo, esta colaboración involucra diferentes sectores como el gubernamental, el privado, la sociedad civil sin fines de lucro y una vasta cantidad de actores que multiplican las formas de articulación en el diseño, la implementación y el monitoreo de las políticas. Esta conjunción de factores y sectores da lugar a discusiones en torno a las oportunidades y riesgos de la participación de actores no estatales en estos procesos. En este marco, es indispensable la producción de evidencia y la sistematización de variadas experiencias a lo largo de la región para guiar la reflexión e informar mejor la toma de decisiones.

Frente a esta necesidad, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC) se propusieron llevar a cabo una investigación con el objetivo de generar un aporte al conocimiento actual sobre las alianzas educativas en América Latina como mecanismo de fortalecimiento de las políticas del sector educativo. El documento ofrece una lente analítica surgida del estudio de experiencias concretas para abordar los principales factores contextuales y endógenos que hacen a su funcionamiento, sus desafíos y oportunidades. Cada uno de los factores que componen las dimensiones de la lente da cuenta de variables sistemáticas surgidas de la indagación de las alianzas analizadas.

Considerando las limitaciones propias de establecer generalizaciones sobre el conjunto de la región, este documento ofrece herramientas para pensar las alianzas como espacios de colaboración y anticipar algunos de los desafíos y oportunidades más recurrentes. Con ello se espera que los y las tomadores de decisiones en gobiernos, organizaciones de la sociedad civil, sector privado y otros sectores encuentren inspiración y herramientas para fortalecer las políticas de la región, colaborar de forma estratégica y lograr una mayor justicia educativa.

Leé el resumen ejecutivo acá

Encontrá el libro completo en el botón superior “Ver documento”

Descifrando el futuro del trabajo. Automatización y plataformas laborales en el Sur Global.

Publicado en octubre de 2021

El libro “Rompiendo el futuro del trabajo. Plataformas de automatización y trabajo en el Sur Global” es el resultado de la colaboración de muchos/as, en el marco de la iniciativa FOWIGS (Futuro del Trabajo en el Sur Global) que lidera CIPPEC. Más de veinticinco especialistas de Asia, América Latina, Medio Oriente y África del Norte y África Subsahariana transformaron sus valiosos hallazgos en los capítulos de este proyecto con perspectivas heterogéneas.

Los países en desarrollo enfrentan desafíos específicos que la literatura estándar aún no ha logrado incluir como parte de una visión verdaderamente global sobre la interacción entre tecnología y mercados laborales. Este libro tiene como objetivo enriquecer el futuro de los diálogos sobre el futuro del trabajo con evidencia del Sur Global. Esto, a su vez, es clave para la construcción de una agenda de políticas basada ​​en datos que promueva la creación de empleos de alta calidad en los países en desarrollo, en el marco de la cuarta revolución industrial.

El libro cubre dos temas importantes que analizan dos tendencias que han comenzado a impregnar el Sur Global:

1. Automatización

La primera sección trata sobre la hipótesis de la automatización. Cuenta con dos capítulos: “Las nuevas tecnologías y el futuro del empleo en América Latina” de Irene Brambilla, Andrés César, Guillermo Falcone, Leonardo Gasparini; y “¿Desigualdad en riesgo de automatización? Diferencias de género en la intensidad de las tareas rutinarias en los mercados laborales de los países en desarrollo” por Janneke Pieters, Ana Kujundzic, Rulof Burger y Joel Gondwe. En ambos, los/as autores/as cuestionan el supuesto metodológico estándar de qué ocupaciones similares se realizan por igual en diferentes países, independientemente de su etapa de desarrollo y características específicas. Esta sección trae nuevas perspectivas sobre debates relevantes en la literatura, como el fenómeno del “vaciamiento” y la pregunta sobre si el Sur Global está experimentando cambios en los patrones de empleo similares a los observados en el Norte Global.

2. Plataformas laborales

La segunda sección del libro está dedicada a las plataformas laborales y analiza cómo la difusión de estas nuevas formas de trabajo impacta a los trabajadores en los países en desarrollo. Tiene tres capítulos: “El futuro del trabajo en el Sur Global: Trabajo digital, nuevas oportunidades y desafíos” de Diego Aguilar, Joaquín González, Aileen Agüero García y Roxana Barrantes; “Fairwork in the Platform Economy: A Global South Perspective” por Pitso Tsibolane, Maria Belen Albornoz, Arturo Arriagada, Treviliana Eka Putri, Jean-Paul Van Belle, Henry Chavez, Richard Heeks, Kelle Howson, Macarena Bonhomme, Jorge Leyton, Francisco Ibáñez , Louise Bezuidenhout, Mark Graham; y “El trabajo en línea y las mujeres en la India: las oportunidades y los límites del emprendimiento digital” de Urvashi Aneja. Como en el caso de la automatización, estos capítulos brindan nueva evidencia para repensar la relación entre tecnología y empleos al considerar los contextos del Sur Global.